Esta semana se ha publicado un estudio realizado por la Asociación de Consumidores Francesa «60 millions de consommateurs»en la que se analizaron 12 marcas de pañales. En 10 de ellas, se encontraron residuos tóxicos potencialmente cancerígenos, incluso en los catalogados como «ecológicos».
Entre otros, encontraron trazas de pesticidas como el herbicida glifosato (identificado como cancerígeno y contaminante hormonal), tolueno y estireno (ambos hidrocarburos, irritantes y neurotóxicos).
Aunque se encontraron en cantidades ínfimas, hay que recordar que estas sustancias tóxicas están en contacto continuo 24horas con la piel del bebé. Además, si la piel está irritada aumenta el riesgo de penetrar en la piel.
Hay que tener en cuenta que los bebés, absorben a través de la piel más sustancias tóxicas medioambientales por kilogramo de peso que un adulto. Además, tienen menor capacidad para neutralizar y eliminar los contaminantes externos por lo que los efectos adversos pueden ser más intensos.
Este tipo de tóxicos están en la actualidad regulados en caso de inhalación, pero no sobre el contacto de estas sustancias en la piel. A su vez, la situación se encuentra en una especie de «vacío legal» ya que estos fabricantes no están obligados a detallar los «ingredientes» de los pañales al no ser considerado un producto cosmético. Es por eso que la Asociación ha reclamado la prohibición de estos residuos tóxicos en productos como pañales, compresas o tampones.
«60 millons de consommateurs» ya denunció en el año 2013 la presencia de fenoxietanol (un conservante potencialmente tóxico) en las toallitas de limpieza para el bebé. Todavía no se ha desvelado la lista de esas 12 marcas analizadas. Tan sólo han revelado que las marcas Baby Dry de Pampers y Eco Planete fueron las más contaminadas, mientras que las de la marca «Love&Green» y la marca blanca «Leclerc» no presentaban residuos tóxicos. Para la asociación, la existencia de estas dos marcas sin tóxicos demuestra que se pueden fabricar pañales que sean seguros para los bebés. Durante el mes de febrero harán pública la lista con todas las marcas analizadas en su revista.
En España el último análisis realizado sobe pañales fue en 2015 y lo llevó a cabo la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) donde analizaron: la absorción de día y de noche, fugas, sensación de sequedad, precio, opinión de usuarios y los tóxicos usados en los pañales. El resultado de este estudio se puede ver aquí.
Dada la importancia de este tema, si se observa algún tipo de reacciónen lapiel del bebé se debe poner en conocimiento del pediatra, dermatologo y de la OCU, además de cambiar de marca. Como alternativa se pueden utilizar los pañales de algodón, que son reutilizables y más respetuosos con el medio ambiente y la piel del bebé.