‎Vestir al bebé por capas, usar prendas ligeras y adecuar la vestimenta a tus planes.

Se acerca la época más mágica del año, la Navidad. Con la llegada del frío somos muchos los que esperamos que caiga algún copo de nieve que haga que las vacaciones navideñas sean todavía más especiales. ¿A quién no le gusta salir a la calle a hacer un muñeco de nieve?

Sin embargo, las bajas temperaturas pueden acarrear algún que otro constipado que se puede evitar si abrigas bien a tu bebé. A continuación, te vamos a dar algunos consejos para proteger al bebé del frío y poder disfrutar de la nieve.

Viste a tu bebé por capas de ropa

Lo ideal en esta época del año es vestir a los niños (y adultos) por capas, debido a la diferencia de temperaturas entre los interiores y el exterior.
En los interiores suele hacer calor debido al uso (a veces excesivo) de calefacciones. Si vistes a tu bebé con un body y un jersey bien gordo, es posible que pase calor cuando se encuentre en la escuela infantil o en una casa. Al quitarle el jersey, lo más seguro es que vaya desabrigado para la temperatura que haya en la habitación (lo ideal es sobre los 22º -23ºC).

De ahí que se recomiende vestir también a los pequeños con varias capas de ropa para ir “ajustando” su vestimenta a la temperatura de cada lugar y momento.
Si tu bebé todavía lleva pañal, se recomienda el uso de bodies de manga larga durante el invierno. Encima de éste, puede ponerse una camiseta finita y un jersey no muy grueso. El uso de leotardos debajo del pantalón puede ser muy buena opción si se va a estar un rato en la calle paseando o en el parque.

Si tu hijo todavía no camina puedes usar calcetines gorditos en lugar de zapatos. Los hay con antideslizantes, ideal si empieza a dar sus primeros pasos. Si vais a pasear por la calle, especialmente si hay nieve, lo mejor es usar algún tipo de calzado impermeable para mantener los pies calientes.

Es muy importante tapar bien la cabeza de tu bebé cada vez que salgáis a la calle. Usar gorros, preferiblemente de tejidos naturales como lana. El uso de bragas de cuello también es recomendable en los días más fríos del año.

Para las noches de invierno, lo mejor es usar sacos de dormir que mantitas. Recuerda que la cuna debe estar despejada de peluches y mantas.

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Tips para que tu bebé no pase frío en la nieve

Como acabamos de apuntar, es preferible llevar muchas capas a una sola más gruesa. Sí, también en climas fríos y adversos como puede ser en la nieve.
El tejido polar es ideal para estas inclemencias del tiempo. Es un material ligero, finito y abriga mucho. Actualmente puedes encontrar este tipo de prenda en prácticamente cualquier tienda infantil de ropa, deporte y/o grandes superficies.

Es importante que el tejido que pongamos a nuestro bebé abrigue, pero también que sea resistente al agua y a la nieve. Especialmente si vais a jugar en la calle.
Elegir un buen calzado es crucial. Tanto en tu día a día como en ocasiones especial como si planeáis un finde en la nieve en familia.

El calzado del bebé debe ser respetuoso con la anatomía del pie del pequeño. La punta debe ser ancha y redondeada para que los deditos puedan moverse libremente. La suela debe ser flexible y tener en mismo grosor en toda su superficie. Y la plantilla extraíble. El tejido debe ser impermeable en el exterior del zapato para que no se cuele humedad ni nieve. ¡Y que también les proteja del frío!

Portear a tu bebé en la nieve

Es posible portear a tu bebé en la nieve cómodamente y de manera segura si tomas las precauciones necesarias.

Para empezar, no uses buzos ni prendas muy gruesas (ni para el bebé ni para la persona que va a portear). Éstas sólo os  incomodarán tanto al pequeño como a ti. Además recuerda que el calor humano es la mejor “calefacción”. 

Además, recuerda que el calor humano es la mejor “calefacción”. Por tanto, si vas a portear cuenta con ese calorcito “extra” que os proporcionaréis mutuamente. Al bebé le ayuda a regular su temperatura corporal.

Viste a recién nacido y/o bebé con prendas que abriguen pero ligeras. Usa un portabebés adecuado al peso y tamaño de tu bebé. Si tienes un bebé recién nacido o un pequeño de menos de 9 kilos, la camiseta crisálida, el fular elástico o la mochila de recién nacido de Amarsupiel son tus mejores opciones para portear en la nieve.

Si tu bebé tiene a partir de los 5-6 meses te recomendamos portear con un mei tai y/o mochila evolutiva.

Encima del portabebés tienes tres opciones: usar un cobertor universal que se adapta a cualquier chaqueta, el Abrigo de Maternidad y Porteo 5 en 1 y/o el Abrigo Unisex de Amarsupiel.

Son prendas muy ligeras, elegantes, cómodas y calentitas. Su exterior es water repellent y por dentro están forrados con un material extrasuave y calentito: la coralina

En definitiva, se puede disfrutar de la nieve y de las bajas temperaturas sin necesidad de pasar frío y sin acatarrarse. Y recuerda, el calor humano es la mejor receta contra el frío. Por tanto, ¡portea también en invierno!