Tras dar a luz, muchas madres se preguntan cuándo volverán a tener la regla o cómo será su primera menstruación. Lo cierto es que el regreso de la regla depende de cada mujer y está condicionado por muchos factores.

Después del nacimiento de un bebé, el útero de la madre necesita unos quince días aproximadamente para volver a la normalidad, tanto en lo que se refiere al tamaño como a su posición.

Es comprensible que el ciclo menstrual necesite también un tiempo para regularizarse de nuevo, pues durante el embarazo la mujer experimenta un fuerte desajuste hormonal que le lleva a la anovulación y la ausencia de menstruación. A pesar de esto, es posible que la mujer presente ligeras pérdidas vaginales o loquios durante esta etapa postparto.

La reanudación del ciclo menstrual tras el parto es un proceso endocrino y requiere que los niveles hormonales vuelvan a la normalidad. Las hormonas femeninas necesitan también un tiempo para estabilizarse. La depresión postparto en esta etapa también sucede en ocasiones.

Aunque, el regreso de la regla tras el parto, es un mecanismo en el que cada mujer tiene su propio ritmo y en el que interviene un factor muy importante: si estás dando el pecho. Sin embargo, intervienen otros factores como, por ejemplo, la tiroides, el estrés o el tipo de parto.

Cómo afecta dar el pecho a la menstruación

Hay un factor fundamental que impide que el ciclo hormonal vuelva a su estado normal: la lactancia materna o amamantamiento. Se debe a que la lactancia, concretamente la prolactina inhibe la aparición de la regla.

Cuando tu bebé succiona las mamas, se libera prolactina, la hormona que activa la producción de leche. Pero, además, la prolactina inhibe la liberación de estrógenos y progesterona, más conocidos como hormonas sexuales. Sin estrógenos ni progesterona no aparece el ciclo menstrual y no se produce ovulación, así que el útero no se prepara para un nuevo embarazo. Por lo tanto, la regla no aparece dando de mamar.

Si se alimentas a un bebé con leche de fórmula o con una alimentación mixta es probable que los ciclos menstruales se reanuden antes que si se está amamantando.

En las mujeres que no amamantan suele aparecer tras el puerperio o cuarentena, es decir, unos 40 días tras el parto.

En el caso de no dar el pecho al bebé, lo más normal es que la actividad ovárica se reinicie tras el puerperio o cuarentena. En este tiempo, el útero se ha reducido y los niveles hormonales comienzan a normalizarse. Sin embargo, en algunas mujeres puede ser a los dos o tres meses.

Si, por el contrario, se alimenta exclusivamente con leche materna es probable que la regla no regrese hasta que termines de lactar. La clave de que sea diferente en unos casos y otros depende de la producción de leche y de la cantidad de veces que el bebé se enganche al pecho. Si el bebé mama muy a menudo y durante mucho tiempo, la prolactina permanece constantemente elevada en el organismo materno, y el ciclo tarda un poco más de tiempo en reactivarse.

En el caso de que dejes de amamantar por las noches, disminuyes el número de tomas o le das una alimentación mixta, la regla aparecerá antes. Por ello, lo más frecuente es que vuelva a los 6 u 8 meses tras el parto. Esto coincide cuando empezamos a complementar la leche con otros alimentos. Y, ¿puede afectar la menstruación a la lactancia?

Independientemente de la lactancia, la primera ovulación se produce antes de la primera menstruación, así que podrías quedarte embarazada antes de que aparezca la primera menstruación.

Cuándo vuelve la regla después de dar a luz y cómo es la primera regla tras el parto

Al principio, la regla aparece como un manchado, es decir, un periodo leve que forma pequeñas manchas de sangre en la ropa interior. Las menstruaciones tras el parto suelen ser diferentes a las anteriores al embarazo, pudiendo ser más abundantes, con una duración más o menos larga y pueden aparecer coágulos o una sangre densa.

Además, el ciclo menstrual puede aparecer más irregular de lo habitual. Esto significa que es normal que la segunda menstruación tarde más de un mes en aparecer, o bien, que regrese antes de lo esperado. Poco a poco, la frecuencia de las ovulaciones se irá regulando hasta volver a la normalidad.

Para esta primera regla tras el parto, se recomienda utilizar compresas de algodón en lugar de tampones por si hubiera sensibilidad en la zona.

Si tienes dudas sobre este proceso, contacta a tu matrona y/o ginecólogo.

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