Tu bebé ya tiene los órganos internos casi formados pero aún no está aún preparado para vivir fuera del útero materno
¿Has notado un latido rítmico y acompasados en tu barriga? A diferencia de lo que pudiéramos pensar, no se trata del corazón de tu pequeño si no de hipo. ¿Sabías que el hipo prepara al bebé para respirar fuera del útero? Por tanto, es muy habitual tanto que tenga hipo como que lo notes. En esta nueva entrada del blog de Amarsupiel, Crianza Alternativa, te contamos todo lo que sucede en la semana 21 de gestación. ¡No pierdas detalle!
Semana 21: Desarrollo del bebé
En la semana 21 de embarazo, te encuentras casi en el sexto mes. Tu bebé es del tamaño de un plátano aproximadamente.
Tal y como apuntamos en el post anterior, en el que nos deteníamos en la semana 20 de embarazo, tu pequeño ya tiene casi formados del todo sus órganos internos y su apariencia cada vez es más semejante a cómo será al nacer. Sin embargo, tu pequeño todavía no sería capaz de vivir de manera independiente fuera del útero materno en estos momentos.
En este momento de la gestación, el bebé ya es capaz de abrir los ojos, totalmente formados, aunque sólo percibe la luz ( su iris todavía no tiene pigmentación).
Los nutrientes para seguir creciendo le llegan a través del cordón umbilical procedente de la placenta. ¿Digiere mi bebé? En la semana 21 de embarazo, los bebés tragan líquido amniótico, sustancia que deberán digerir poniendo a «prueba» su sistema digestivo. Este fluido, además, les ayuda a desarrollar sus pulmones y les proteger de posibles golpes.
Como hemos apuntado anteriormente, es posible que empieces a notar una especie de latido en la tripa: se trata de hipo y tiene una función vital: la de fortalecer el sistema respiratorio del bebé con el objetivo de prepararle para la respiración una vez nazca. Por cierto, ¿Sabías que su corazoncito late entre 120-160 pulsaciones por minuto? Esto es el doble de rápido que el de un adulto.
Seguramente ya hayas empezado a notar las pataditas de éste; de hecho él/ella no paran dentro de la barriga agitando manos, sacudiendo brazos y piernas (especialmente cuando la madre descansa). Estos movimientos son muy importantes ya que contribuyen al desarrollo de su sistema muscular.
A pesar de que no pare de moverse, lo cierto es que tu bebé duerme muchas horas. ¿Sabrías decir cuantas aproximadamente? Pues se estima que unas 18 horas diarias. Sin embargo, como es de esperar, todavía no tienen patrones de sueño y vigilia. Esto sucederá en las próximas semanas.
Síntomas de embarazo en la semana 21
Aunque seas primeriza, casi seguro que la tripa ya te ha crecido lo suficiente como para que la gente se dé cuenta que te encuentras en la dulce espera. Si te encuentras bien y tu obstetra o matrona no te dicen lo contrario: puedes seguir haciendo vida normal pero evita excesos y el estrés.
En esta etapa, los niveles hormonales ya se deberían haber estabilizado y ya deberías haber olvidado las incómodas molestias de los primeros meses (si las tuviste). Sin embargo, quizá sientas leves dolencias como ardor, sofocos, estreñimiento, aparición de estrías y/o calambres (especialmente en las piernas y mientras duermas). Además, el peso adicional puede causar ciertas molestias que podrían alargarse hasta el final del embarazo.
El estreñimiento en la mujer embarazada es muy habitual. Para combatirlo, lo mejor es llevar una dieta sana y equilibrada basada en la ingesta de alimentos ricos en fibra, pastas integrales y cereales y ¡beber mucha agua!
¿Tienes la nariz congestionada? Tranquila, ¡también es muy normal!. Los estrógenos pueden favorecer la inflamación de las mucosas. Lo que provoca lo que se conoce como rinitis del embarazo: cuyos síntomas son muy parecidos a un resfriado. Si sufres de esta patología, te ayudará usar humidificadores de aire y realizarte lavados nasales. Si te ayuda a respirar mejor, eleva tu cabeza para dormir con cojines.
Cuando acudir al médico
El sangrado vaginal, fuerte dolor abdominal, dolor de cabeza intenso y constante y/o disminución o ausencia de movimientos fetales son motivos para acudir a urgencias. Así como si tienes vómitos o náuseas recurrentes o pérdida de líquido amniótico. Ante cualquier duda es preferible acercarse a un hospital que quedarse con la inquietud.
Recomendaciones
Si estas embarazada de 21 semanas y te encuentras bien, es buen momento para empezar a preparar la llegada de tu bebé. Si bien es cierto que todavía quedan muchas semanas, la tripa cada vez te pesará más y te resultará más difícil moverte con agilidad. Aunque te encuentres perfectamente, no hagas excesivo esfuerzo y descansa todo lo que puedas.
Es muy importante que te mantengas activa durante todo el embarazo (excepto si tu médico te ha indicado lo contrario) y hagas ejercicio de manera regular. Si tienes dudas sobre qué tipo de deporte realizar, consulta con tu matrona y/u obstetra. Así como si tienes dudas sobre la alimentación.
Disfruta de esta etapa en la que lo más probable es que te encuentres bien y todavía no te notes muy pesada.
