La llegada de un bebé a la familia “trastoca”, irremediablemente, los hábitos y costumbres de sus progenitores especialmente de la madre. Sin embargo, no se trata de dejar de hacer cosas que te gusten por el hecho de convertirte en mamá, si no de adaptar estos hobbies a la nueva realidad respetando siempre las necesidades del pequeño. Practicar actividades físicas de manera controlada después de tener hijos tiene muchos beneficios físicos y emocionales. Hacer ejercicio libera hormonas de bienestar como las endorfinas y la serotonina que hacen que te sientas mejor contigo misma; además, inculca hábitos saludables a los más pequeños de la familia.

Para que la experiencia sea lo más satisfactoria posible, es importante que las necesidades del bebé estén cubiertas (que haya comido, con el pañal limpio y evitar las horas de descanso) antes de iniciar la práctica del deporte.Son muchos los deportes que se pueden practicar porteando una vez tu cuerpo se ha recuperado del parto y se tenga soltura usando el portabebés. Si la semana pasada hablábamos de los beneficios de pasear con el bebé, hoy ampliamos el abanico.

Yoga con bebé

Un buen deporte para recuperar la forma después del nacimiento de un hijo es el yoga; indicado, especialmente, para fortalecer los músculos de la zona abdominal y el suelo pélvico. Tanto sus ejercicios como la meditación pueden realizarse mientras se portea, con el bebé pegadito al cuerpo. Se recomienda usar un portabebés ergonómico simétrico que reparta el peso del pequeño en ambos hombros, pudiendo colocarle tanto delante como detrás. Los fulares semi-elásticos son una buena opción para practicar este deporte tan completo.

Baile y porteo

Una de las opciones más divertidas para ponerse en forma es el baile. Moverse al ritmo de la música, con movimientos suaves y evitando música excesivamente alta, mientras se portea al hijo es una experiencia maravillosa.  Se recomienda un tejido más rígido para evitar el efecto rebote.

Senderismo con portabebés

La montaña es uno de los entornos más saludables para hacer deporte. El senderismo es una buena opción para los progenitores más aventureros, siempre que la ruta no sea demasiado exigente. En general, no es necesario usar un portabebés específico para el campo cuando el bebé todavía no anda, pudiendo usar el sistema de porteo que se utiliza habitualmente.

Cuando los niños crezcan es recomendable usar una mochila ergonómica, que reparta el peso sobre el cuerpo de manera simétrica y permita al pequeño bajar y subir con facilidad. Las mochilas portabebés de montaña son otra alternativa apta niños y diseñadas específicamente para senderismo. Sin embargo, son mochilas que pesan mucho debido a que llevan una estructura rígida y aparatosa. Otros inconvenientes son que en ellas el pequeño va muy alto y separado del porteador.

Bañarse mientras se portea

En el mercado existen portabebés ergonómicos diseñados exclusivamente para el momento del baño como, por ejemplo, como la bandolera de agua de Amarsupiel, confeccionada con tejido tipo bañador, transpirable y de secado ultra-rápido. Se recomienda portear al bebé, preferiblemente, delante y en posición vertical. Si se opta por otras actividades que impliquen mojarse o caminar por la playa es preferible optar por un portabebés fresquito como, por ejemplo, la bandolera de rejilla de Amarsupiel, que es perfecta para pasear.

Kangatraining

En los últimos años han proliferado las actividades que están diseñadas específicamente para madres que portean a sus bebés como, por ejemplo, el Kangatraining. Se trata de un tipo de entrenamiento físico ideal para ponerse en forma después del embarazo. Los ejercicios están destinados principalmente a fortalecer el suelo pélvico y la faja abdominal. Se recomienda iniciar esta práctica pasadas las 8 semana desde el parto, o de 10 a 12 en el caso de cesárea.

En resumen, el porteo permite realizar un deporte de intensidad entre suave y moderado en compañía del pequeño. Es importante tener prudencia, escuchar a tu cuerpo e introducir las actividades de manera paulatina y siguiendo las recomendaciones del obstetra y/o matrona.