Estamos inmersos en una época de resfriados (y todavía nos queda todo el invierno). En este post te daremos remedios caseros para curar el catarro del bebé. Y como dice el dicho: es mejor prevenir que curar, también os vamos a dar tips para prevenirlos. ¡Si tienes niños en casa, este post te va a resultar muy útil!

Estornudos, mocos, tos, dolor de garganta…son algunos de los síntomas del resfriado común y de la gripe. Los pequeños llevan ya semanas sufriendo estas dolencias…y es que es difícil no caer enfermo en esta época del año.  Desde Amarsupiel queremos echaros una mano para intentar prevenir los catarros y aliviar sus síntomas. Te damos algunos remedios caseros resfriado.

¿Qué hacer para evitar los resfriados?

Una de las medidas más eficaces para evitar todo tipo de resfriados y otras enfermedades es llevar una buena higiene de manos.  Y es que como dice la Organización Mundial de la Salud (OMS): ¡esta práctica salva vidas!

Lo vimos en durante la terrible pandemia mundial de coronavirus.  Cuando poco o nada se sabía de los tratamientos para curar sus síntomas cuando estalló. Sin embargo, una cosa estaba clara desde el principio: la prevención era clave. Para ello, los expertos insistieron desde el primer momento que el lavado de manos era crucial para frenar la propagación del virus. Lo mismo ocurre hoy para evitar catarros, resfriados , bronquiolitis y otras dolencias.

Remedios caseros eficaces para curar resfriados

La miel es uno de tus mejores aliados para aliviar los síntomas del resfriado. Mézclalo con leche calentita o agua tibia.  Es importante recordar que no es aconsejable dar este alimento a menores de 1 año por riesgo al botulismo infantil.

Otro remedio muy efectivo es tomarte una sopa de pollo antes de irse a la cama. Si sospechas que sufre dolor de garganta, no le des la comida ni líquidos demasiado calientes.

Es muy importante mantenerles muy bien hidratado, especialmente, cuando están malitos. Si tu bebé todavía toma pecho, ofrécele frecuentemente. Si no, ofrécele agua regularmente o calditos calientes.

Muchos bebés pierden el apetito cuando están flojitos (es normal ); sin embargo debemos mantenerlos bien hidratados y comprobar que siga haciendo pipis y deposiciones con regularidad.

Si tu pequeño tiene las fosas nasales obstruidas por los mocos, lo más efectivo es realizar lavados nasales con solución salina frecuentemente. Si todavía no aguanta la cabecita, túmbale con la cabecita ligeramente inclinada hacia un lado e introduce por un orificio nasal la solución salina (con 2ml es suficiente si es muy pequeñito). Si tiene más control, puedes sentarle para realizarle los lavados nasales. No suele gustarles por lo que ten mucha paciencia.

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Porteo, abrazos y mimos

Ver a nuestros peques malitos es muy duro (aunque sea por un simple resfriado). La mejor receta de todas es darles muchos mimos, muchos abrazos y portearles siempre que puedas. Estar en contacto directo y constante con el cuidador principal les calma, da seguridad y protección. Además, ¡están a la altura de un beso para proporcionarles todo el efecto que necesitan!

Si tienes un recién nacido, te recomendamos el uso de un fular elástico, una camiseta crisálida o una mochila indicada para estos bebés. Si por el contrario tu bebé es más mayor, la bandolera, el mei tai o una mochila evolutiva puede ser un auténtico salvavidas.

Los portabebés, además de fomentar la lactancia materna, también liberan tus manos para que puedas atender todas las necesidades de tu pequeño y realizar otras tareas como cocinar, trabajar, etc.

En resumen, lo más importante para prevenir el virus del resfriado es tener un sistema inmune fuerte. Para ello es importante llevar una dieta equilibrada y estar muy bien hidratado. Otras prácticas como lavarse bien y con asiduidad las manos o determinados alimentos (miel, caldo de pollo) pueden aliviar los síntomas del catarro común.Si notas que tu pequeño está muy alicaído, tiene dificultad para respirar, por favor, acude a un centro médico para que le exploren.

¡Mucha ánimo familias!