A priori no hay ningún impedimento para llevar a tu bebé a la playa, pero hay que tomar ciertas precauciones.
Lo mejor para cualquier bebé es estar en contacto con la naturaleza y poder disfrutar al aire libre de tiempo de calidad con su familia. En verano, uno de los destinos favoritos por los españoles es la playa. Pero, ¿puede un recién nacido ir al mar? Si acabas de tener un recién nacido y estás dudando de qué vacaciones elegir, quizá este post te ayuda a tomar una decisión.
Los recién nacidos pueden ir a la playa ya que, a priori, no hay nada que se lo impida. No obstante, muchos profesionales aconsejan esperar a los 6 meses para hacerlo. Sin embargo, cada familia ha de decidir si es oportuno ir a la playa con un recién nacido.
Lo cierto es que un bebé tan pequeño no suele disfrutar de esta experiencia. Suelen empezar a hacerlo cuando gatean. En cualquier caso, tenga el bebé un mes o 6, es muy importante seguir una serie de pautas para que esta experiencia sea segura para él y gratificante.
¿Cuándo ir a la playa?
El primer factor a tener en cuenta es la franja horaria. Un recién nacido NO debe pasar calor. De ahí, que se recomienda evitar las horas centrales del día en los primeros años de vida. Esto es de 12-18 horas debido a la exposición al sol y las altas temperaturas para evitar los golpes de calor. Lo ideal es ir a la playa o a la piscina a primera hora del día (entre 8 y 11h) o a última de la tarde (a partir de las 18h). Cuando son tan pequeñines su mecanismo termorregulador no funciona correctamente y es importante evitar riesgos innecesarios (hipotermia).
Los expertos recomiendan evitar la exposición directa al sol hasta los 2 años. La principal razón es que su piel es extremadamente sensible. Por ello, es mejor tener a los pequeños siempre bajo la sombrilla o tienda de playa y usar prendas fresquitas y transpirables que hagan de barrera física entre los rayos solares y la piel. El gorro y las gafas de sol, también son muy aconsejables.
Con la fular de bambú de Amarsupiel podrás proteger a tu bebé de los rayos UVA. La calidad y propiedades de su tela portabebés protegerá a tu bebé de esos rayos del sol, tan dañinos para los adultos y sobre todo para bebés.
Otras recomendaciones
No se puede usar crema protectora en menores de 6 meses. Si tu bebé ya tiene 6 meses se recomienda el uso de crema de protección solar. Ésta se debe aplicar aproximadamente 30 minutos antes de bajar a la playa. Los expertos recomiendan usar siempre un factor muy alto (50) y, a poder ser, resistente al agua. Aunque se use de éste tipo, es muy importante poner crema cada 2 o 3 horas y/o después de cada baño.
Otro aspecto muy importante a tener en cuenta es vigilar la hidratación del peque. Tanto si estás dando pecho como si toma leche de fórmula o se le ha empezado a dar agua, hay que ofrecerle con mucha frecuencia.
Lleva una buena bolsa de playa cargada de pañales (de agua y convencionales), agua, alimentos frescos como fruta (si el bebé tiene más de 6 meses), un portabebés ergonómico, toallas y, si puede ser, una piscina plegable o hinchable.
¿Puedo bañar a un recién nacido en la playa?
Como hemos apuntado anteriormente, muchos profesionales recomiendan no llevar a la playa ni bañar a un bebé menor de 6 meses en el mar. El riesgo a infecciones y la dificultad que tienen para controlar su temperatura corporal son las principales razones. Además, dicho sea de paso, no hay ninguna necesidad de bañarles porque son demasiado pequeños para disfrutarlo. Sin embargo, si quieres puedes, pero no de cualquier manera.
El baño debe ser muy breve (menos de 10 minutos) y, casi más importante, de manera muy progresiva. Evitar los chapuzones repentinos y/o sumergirlos para evitar las otitis. En lugar de esto, mójale la cabecita con mucho cuidado y sécale bien la carita al salir.
Para que ésta sea una experiencia gratificante, es importante tómate tu tiempo para ir mojándole poco a poco y esperar a su reacción. No hay ningún motivo para “forzar” ese primer baño. Él no lo necesita y, seguramente, tampoco lo disfrutará.
Como hemos dicho, su sistema termorregulador es todavía muy inmaduro y no controla adecuadamente su propia temperatura, por lo que puede coger frío con mucha facilidad. El uso de un neopreno puede ser una buena opción para evitar que coja frío.
El uso de portabebés de agua puede hacer de ésta una experiencia mucho más gratificante. El bebé nota el calorcito de su madre, ésta puede disfrutar del baño con las manos liberadas para atenderle de la forma en que lo necesite. En nuestra tienda online puedes encontrar el fular de agua, ideal para los recién nacidos y/o los bebés más pequeñines y la bandolera de agua que aguanta hasta los 12-15 kilos.
En resumen, un recién nacido puede ir a la playa siempre y cuando se sigan una serie de pautas a rajatabla: usa el sentido común y apuesta siempre por la seguridad del bebé. Evita las horas centrales día, protégele muy bien del sol e hidrátalo con frecuencia.
¡Felices vacaciones!
