El desarrollo del bebé los primeros meses de vida es apasionante. Prácticamente cada semana que pasa hay nuevos logros y hitos adquiridos. En concreto, en el tercer mes hay muchas las novedades. Si tienes un peque de esa edad o estás a punto de ser mami, este artículo te interesa.

¡Estos tres meses han sido trepidantes! Los primeros juntos al otro lado. La mayoría de mamis habréis descansado más bien poco, habréis pasado más de una crisis de lactancia y de sueño. Y lo más importante: os habéis estado conociendo y adaptándoos a la nueva realidad familiar mes a mes.

Ahora tu bebé ya tiene tres meses, os empezáis a conocer mejor, cada vez interactúa más contigo y aprende cosas nuevas día a día.

Alimentación

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda seguir con la lactancia materna exclusiva (LME) hasta, al menos, los 6 meses de edad. No hay un alimento más completo para tu bebé. Sin embargo, cualquier leche de fórmula que existe en el mercado español es segura y su principal objetivo es el correcto desarrollo de tu pequeño. Es el pediatra el que te indicará qué leche de fórmula usar si te decides por este tipo de alimentación.

En líneas generales la alimentación del bebé de tres meses es menos frecuente que la del recién nacido, independientemente del tipo de alimentación que hayas elegido. La mayoría de peques en este momento de su vida comerán entre 6-8 veces y alrededor de los 150ml de promedio.

Si estás dando el pecho, es posible que notes a tu bebé más agitado al amamantar e insaciable. En el tercer mes hay una de las peores crisis de lactancia. Se conoce como crisis de lactancia a un notable aumento de demanda  del bebé. Esta que nos ocupa este mes es de las más complejas porque a esto se le une un cambio en la producción de leche. El cuerpo empieza a ajustar la producción a las necesidades del bebé.  Muchas madres ponen en duda que su cuerpo pueda seguir alimentando a su bebé de manera exclusiva y, por tanto, es la que más tasa de abandono de lactancia registra.

Rutina de sueño

Es posible que los hábitos de sueño de tu bebé esté sufriendo algunos cambios. Las tomas nocturnas se irán reduciendo, por el contrario, comerá más durante el día. Al estar mucho más activo durante el día, es posible que llegue a la noche más cansado. La mayoría de bebés de tres meses suelen dormir del “tirón” 4-5 horas por la noche y realizan entre 3 y 4 siestas diarias.

Es muy buen momento para iniciar ciertas rutinas que ayudarán a estructurar mejor día del bebé de tres meses y favorecerán el descanso nocturno. Puedes empezar a crear una rutina de sueño: masaje suave tras el baño, leerle un cuento, etc. Intenta reducir estímulos antes de acostar a tu bebé. Muchos bebés y niños se activan con el baño, si es así báñale mejor antes de cenar; de lo contrario puedes aprovechar para bañarlo justo antes de ponerle en la cuna.

Recuerda que debes acostar a tu bebé en la cuna boca arriba, no te asustes si cuando aprenda a girarse te lo encuentras en otra postura.

El porteo, tu mejor aliado

Tu bebé sigue necesitando mucho contacto piel con piel, muchos abrazos y atención. Portearle te ayudará a cubrir estas necesidades y, además, te libera las manos para hacer otros quehaceres. ¡Son mano de santo para dormir a los bebés! Los pequeños que son porteados desde el «primer día», suelen calmarse al ponerles dentro del portabebé. Si estás dando el pecho, tener a tu bebé tan cerquita te favorece la lactancia materna.

Para un bebé de tres meses, recomendamos tanto la Camiseta Crisálida de Amarsupiel, como el fular elástico o la mochila de recién nacido. Con cualquiera de estos portabebés podrás portear cómodamente y de una manera segura.

desarrollo-bebe-tres-meses

HITOS DEL DESARROLLO

Como ya hemos apuntado, en el tercer mes tu bebé está “hambriento” por aprender y va asimilando todo como una esponja. Cada vez es más consciente tanto de su cuerpo como del entorno que le rodea.

  • Crecimiento y desarrollo físico: Tu bebé de tres meses está creciendo entre 3 y 4 cm al mes y entre 0,5 kg-1kg durante el mismo período de tiempo. Aunque habrá meses que crezca más y otros en los que su crecimiento se estaque (es normal). Si tienes dudas o preocupaciones sobre la talla de tu bebé, por favor, consulta con tu pediatra.
  • Desarrollo motor: tu bebé cada vez controla mejor su cuerpo. Los reflejos involuntarios de las primeras semanas se han convertido en movimientos voluntarios: es capaz de mover su cabeza, sus manos y sus pies. Es capaz de llevar su mano a la boca para jugar y explorar. ¡Dada la fuerza que está adquiriendo en el cuello pronto podrá sostener el cuello por sí mismo! Es posible que cuando esté tumbado boca arriba quiera girarse (rodar) o, incluso, ponerse boja abajo (todavía tardará uno o dos meses en hacerlo, pero es posible que ya lo esté intentando). Os recordamos que no es aconsejable forzar ninguna postura, ni ponerle “tummy time” si no lo hace por sí mismo. Tampoco ponerlo boca abajo apoyándose en los antebrazos si él mismo no se coloca de esta manera.
  • Habilidades: es posible que empiece a coger los objetos que le ofreces y hasta que siga con la mirada a las personas de su alrededor y los objetos que tenga cerca.
  • Sentidos: su visión ha mejorado, de ahí tenga más facilidad para reconocer las caras más familiares (papá y mamá). Además es más sensible a formas (círculos, espirales, etc).
  • Comunicación: a estas alturas tu pequeño no sólo reconoce tu voz si no es capaz de diferenciar el tono y énfasis que usas cuando, por ejemplo, le lees un cuento o le cantas una canción. Ya puedes tener “conversaciones” bidireccionales con él/ella, que consisten básicamente en intercambios de sonidos, sonrisas y gestos. ¡Sí, ya tiene adquirida la sonrisa social! Sus balbuceos están a la orden del día (descifrarlos ya es otra cosa ;). Además, después de tantas semanas juntos ya eres capaz de reconocer cuando llora por hambre o de sueño, por ejemplo. Evita  el uso de tabletas y pantallas ya que retrasan el habla.
  • Imitación: ¡juega con tu bebé a que imite tus movimientos o expresiones faciales!
  • Juego: tu bebé de tres meses ya disfruta jugando. Es cierto que sus juegos son muy limitados todavía pero cada vez mostrará más interés por los juguetes y otros objetos.

Es importante destacar una vez más que cada bebé se desarrollo a su manera y tienen sus propios ritmos. Nunca compares a un niño con otro (ni siquiera entre hermanos). En las visitas periódicas al pediatra te irá preguntando por los hitos logrados para ver si todo se está desarrollando con normalidad. Si tienes dudas o preocupación por el desarrollo de tu pequeño, consulta con su pediatra.

Si te ha gustado este contenido, no dudes en compartirlo. Nos ayuda mucho a seguir creciendo.