Consejos prácticos para dar el pecho a tu bebé: cómo asegurar un buen agarre, las posturas más cómodas para amamantar, cómo sostener al bebé, etc.
Dar el pecho puede ser una experiencia muy gratificante, además de beneficiosa, si sabes cómo hacerlo. Por ello es muy importante que te informes antes del nacimiento de tu bebé, consultes todas tus dudas con un experto y, llegado el momento, estés bien arropada y contactes con un profesional si tienes dolor o surge alguna complicación.
Beneficios de la lactancia materna
Si nos leéis habitualmente sabréis que somos unas fieles defensoras de la lactancia materna. Está demostrado que éste es el mejor alimento para los bebés. Por ello, los expertos recomiendan la lactancia materna exclusiva al menos hasta los 6 meses de edad por sus propiedades. La leche materna se adapta a las necesidades de tu bebé en cada momento; incluso cambia si el bebé está malito. La madre con sus besos va recogiendo “muestras” de las bacterias y virus que hay en la piel de su pequeño para crear anticuerpos que pasarán a través de la lache materna. De ahí que uno de los beneficios más importantes sea la transferencia de anticuerpos y la reducción del riesgo de sufrir determinadas enfermedades, alergias y la muerte súbita.
Siempre se habla de los beneficios para el bebé, que son incontables. Pero también hay muchos para la madre: favorece el vínculo emocional entre madre e hijo, reduce el riesgo de padecer depresión postparto, entre otros.
¿Cómo me preparo para la lactancia?
Dar el pecho es lo más natural sin embargo, cuanta más información recopiles al respecto, más segura te encontrarás en el momento de la “verdad”. Encontrarás muchas publicaciones enfocadas a explicarte cómo afrontar este “reto” de la lactancia materna. Desde Amarsupiel os recomendamos leer a la experta Alba Padró. Dispone de varios libros publicados sobre este tema como “Mucha teta. El manual de la lactancia materna” o “Somos la leche. Dudas Consejos y Falsos Mitos sobre la lactancia”.
Nuestra recomendación es que si tienes dudas sobre este tema se las traslades a tu matrona antes del parto. Ella o él te darán consejos prácticos para prepararte para la lactancia materna antes del nacimiento.
Éste es uno de los temas estrella en los cursos de preparación al parto que se realizan generalmente de forma presencial en los centros de salud y/o hospitales.
Si lo prefieres, también existen cursos de preparación a la maternidad/paternidad que puedes realizar de manera online. En nuestro apartado de cursos podrás encontrar el impartido por la matrona Celia Padilla de Oh Mama Matrona. Puedes contratar el curso entero /muy completo y actualizado) o la sesión individual de lactancia materna. También ofrecen asesorías privadas de lactancia materna tanto a domicilio como online.
Técnica adecuada de amamantamiento
Si no hay ninguna razón médica, el recién nacido debe ser puesto inmediatamente encima de el cuerpo de su madre tras el parto. Es crucial realizar contacto piel con piel con la mamá al menos la primera hora de vida. Si el bebé se deja en el abdomen de la madre, éste tiene el reflejo de “escalar” hacia su pecho para alimentarse. Teniendo esto en cuenta podríamos decir que es algo innato y lo más natural . Sin embargo, la lactancia materna es una habilidad que se va aprendiendo requiere de cierta práctica. Y es que es muy importante tener una buena técnica de amamantamiento.
En grandes líneas, el objetivo es que el pezón mire hacia arriba para que quede ubicado en la zona blanda del paladar del pequeño.
¿Dónde doy el pecho?
En primer lugar es importante establecer un entorno cómodo para amamantar en casa. Busca un lugar tranquilo, sin muchos estímulos en el que tanto el bebé como tú estéis cómodos. En el mercado existen un sinfín de productos enfocados a facilitar la comodidad de ambos durante el amamantamiento como, por ejemplo, las mecedoras o sillones o los cojines de lactancia o almohadas. Para realizar una buena elección hay que priorizar que den un buen nivel de apoyo, qué forma tiene el cojín (los más habituales en forma de “C” o de “U”), su firmeza y también en el tipo de tejido empleado.
Los cojines de lactancia contribuyen a una mejor experiencia gracias a que “descargan” de tensión ciertas partes del cuerpo de la mamá como la espalda, hombros y brazos y acercan al bebé al pecho de su madre (especialmente en recién nacidos). Para ello el cuerpo del bebé debe estar recostado totalmente sobre el cojín y bien pegadito al pecho de su mamá.
Posturas para dar el pecho
No hay una postura mejor que otra para dar el pecho (aunque hay posiciones más usadas que otras). Cada mujer elegirá la que más cómoda le resulte en cada momento. Por ejemplo, si nada más dar a luz no estás cómoda sentada, una buena opción es dar la teta tumbadas de lado con el bebé mirando hacia ellas. Ésta postura acostada o tumbada es muy usada para las tomas nocturnas.
Una de las posturas más usadas es la posición de cuna. Consiste en sentarse en una silla o sillón con el bebé en brazos colocado de lado con su cabecita y cuello recostados en el antebrazo de ésta y su cuerpo en el vientre materno. En la posición inversa, las piernas del pequeño se ubican debajo del brazo de su madre. Otra, consiste en situar al bebé “sentado” en la falda de la madre.
¿Sabías que también puedes dar el pecho mientras estés porteando? Tanto con la Camiseta Crisálida de porteo y lactancia como con la bandolera, fular o cualquier mochila puede amamantar a tu pequeño regulando la altura de éste. Es especialmente fácil y cómo de hacerlo durante las primeras semanas de vida. En nuestra tienda online encontrarás una amplia gama de portabebés ergonómicos clasificados por edades.
Consejos para amamantar
- El pezón debe apuntar al paladar del bebé
- Ofrecer el pezón a la altura de su nariz para lograr un mejor agarre
- Acercarlo bien a la teta con la boca bien abierta e introducir el pezón y gran parte de la aréola.
- Alinear bien al bebé: su cabeza no debe torcida, es decir su oreja, hombro y cadera deben estar en la misma línea.
- Usar posturas en que los dos estéis cómodos
Dudas comunes sobre la lactancia
- ¿Cómo reconocer si el bebé está recibiendo suficiente leche? Un buen indicativo de que tu pequeño está comiendo lo suficiente es que moja más de 6 pañales al día, hace caca blanda regularmente y va aumentando de peso en los controles rutinarios.
- ¿Dar el pecho duele? La lactancia materna no debería doler (al menos pasados los primeros días). Lograr un buen agarre es crucial para que la experiencia no sea dolorosa. Si sospechas que tu bebé no se está agarrando bien (ya sea por que tenga el frenillo corto o cualquier otro motivo) te recomendamos que lo consultes con una matrona. Sus consejos pueden liberarte del dolor y, por tanto, “salvarte” la lactancia materna.
Problemas comunes y soluciones:
- El dolor en los pezones, las grietas y las mastitis son los principales motivos de abandono de la lactancia materna. Si sufres cualquiera de estas patologías, te recomendamos que consultes con un profesional de la salud para ponerle remedio.
- La insuficiente producción de leche es otra de las preocupaciones de muchas mamás, especialmente primerizas.
Consejos para una lactancia exitosa
La lactancia materna es cosa del bebé y de la mamá. Sin embargo, que la segunda tenga un buen acompañamiento y se sienta apoyada es crucial para tener una lactancia materna exitosa. El papel del padre en la lactancia materna es también muy importante. Éste puede encargarse de las tareas del hogar así como asistir a la mamá y al bebé. Un ejemplo muy simple: las mujeres que dan el pecho necesitan ingerir grandes cantidades de agua. Es ponerte el niño al pecho y sentir una gran necesidad de beber agua. Que tu pareja está pendiente de estos detalles, o de si necesitáis el cojín de lactancia o una almohada para la espalda son gestos que marcarán la diferencia. También lo es ocuparse del bebé para que tú puedas descansar o ducharte tranquila.
En resumen, para tener una lactancia materna de éxito infórmate bien y rodéate de profesionales y seres queridos que te apoyen en este apasionante viaje.
